Consejos para cuidar las cicatrices en verano
El sol puede empeorar el aspecto de las cicatrices y su correcta evolución, ya que pueden aparecer marcas oscuras en los bordes. Es aconsejable seguir una serie de cuidados básicos, tanto para cicatrices recientes como para las más antiguas, para prevenir un empeoramiento de las mismas en verano.
1- Favorecer la regeneración: Para estimular y acelerar la regeneración celular es necesario aplicar productos que contengan rosa mosqueta, centalla asiática y/o ácido hialurónico.
2- Cuidar la calidad de la cicatriz: Si percibimos la más mínima evidencia de abultamiento, es recomendable aplicar un tratamiento de presoterapia con lámina de silicona o tiritas, que ha de llevarse puesta 24 horas al día, incluso en la playa o la piscina.
3- Protección solar: La exposición al sol está contraindicada, ya que pueden producirse hiperpigmentaciones en los bordes de la cicatriz. Se debe aplicar cada 60 minutos un filtro solar con factor de protección 50+.
4- Precaución deportiva: Antes de realizar deportes de riesgo es recomendable esperar a que hayan transcurrido un mínimo de cuatro semanas desde que se retiraron los puntos de la herida, y además hay que proteger la zona para evitar golpes o agresiones.
5- Protección acuática: Si la herida es muy reciente, no debemos sumergirla en agua. Sin embargo, si la herida ya está cerrada, podemos disfrutar del baño en el mar o en la piscina, recordando que hay que reponer el filtro solar al salir del agua.