Alimenta tu piel en verano

Todos nos preocupamos por nuestra piel ya que es nuestra gran carta de presentación. Justamente por ello, cualquier cuidado que le demos vale la pena.¿Has pensado cuánto puedes gastar anualmente en cremas faciales especializadas, bloqueadores o jabones para la cara? El cuidado empieza por dentro y la verdad es que esa inversión puede ser mucho menor. Sin embargo, a veces no sabemos qué alimentos son esenciales para prolongar la juventud de la piel.
Lógicamente, y antes que nada, jamás debes olvidar mantener la hidratación. Ten siempre a la mano una botella de agua (que no sea gaseosa ni jugos artificiales) y toma por lo menos dos litros al día y ten en cuenta estos cinco alimentos:
1. Germen de trigo: Le llaman ” la vitamina de la belleza” y no les falta razón. No lo confundas con el salvado del trigo. El germen es la parte del trigo que contiene los mayores nutrientes del grano y su concentración de vitamina E es increíble, más que la de cualquier otro alimento. Basta con dos cucharadas llenas a lo largo del día. Mézclalo con la leche, el yogur o tus ensaladas. Su sabor es bastante agradable, así que no tendrás ningún problema.

2. Aceite de oliva: El aceite de oliva es uno de los pilares de la dieta mediterránea. Es debido a su riqueza en vitamina A, E y K, beneficiosa para las células que conforman nuestros tejidos. Consúmelo en su estado original con tus ensaladas.
3. Boniato: ¿Quieres tener un cabello y una piel radiantes? Apúntate con esta especie de patata dulce que, además, te encantará por su sabor. Su gran aporte de vitamina A es su gran secreto. También es excelente contra la depresión y la osteoporosis. Utilízalo como guarnición en tus platos.
4. Jalea real: No solo te verás con mejor piel si lo tomas sino con mucha energía y libre de estrés, ya que funciona como un equilibrador del sistema nervioso. Tan solo con un par de gotas diarias son las necesarias para mejorar tu piel.
5. Colágeno marino: En realidad, el colágeno es una de las sustancias que mantienen la elasticidad de la piel. Nuestro organismo va generando menos en el transcurso del tiempo. Por eso es tan común notar que muchas cremas de belleza lo tengan en su composición. Sin embargo, ¡qué mejor que consumirlo directamente! Lo puedes encontrar en las algas, en el espinazo y la cabeza del pescado, así como en las patitas de los animales.